lunes, 14 de noviembre de 2016

EL HOMBRE EQUIVOCADO



Recuerdo la noche en que lo vi por primera vez.
Sentí mi corazón brincar y mi alma henchirse de ilusión.
¡Es él!, gritó cada célula de mi cuerpo.
¡Es él!, confirmó mi piel.
¡Es él!, reclamaron mis labios.
Me entregué a la pasión y el mundo cobró color.
El tiempo pasó...mi vida voló veloz como un pájaro en fuga
Y una oscura verdad comenzó a tejerse a mi alrededor,
Asfixiándome, oprimiéndome, sometiéndome...
Él fue una mentira, una cruel mentira que hoy lloro en las sombras.
Él fue el hombre equivocado.